Me convertí en copywriter porque quería que las empresas y negocios como el tuyo pudiesen conseguir con sus textos lo mismo que un libro: conectar, enganchar y enamorar a su potencial cliente.
Una palabra bien utilizada puede ser un triunfo. Mal utilizada el principio del fin.
Las palabras escritas son la única forma que tienes de conversar con tus clientes en Internet. Lo que dices y cómo lo dices determinarán que un usuario se quede, o se vaya sin más.